Estos son pensamientos que me asaltan de vez en cuando. Me hacen vislumbrar un profundo miedo. En ocasiones les doy rienda suelta y...
¿Cómo podría saber si este mundo es real? Tener la certeza de que la gente es real e independiente de mí. Me acuesto en la cama. Me quedo dormido sin darme cuenta. Estoy en otro mundo. Veo cosas, veo gente, veo seres... y puedo interactuar con ellos. Parecen estar vivos. A veces me persiguen. A veces vuelan conmigo. Y después, sin saber cómo, estoy de nuevo en este mundo, despertando. Me pareció que aquello era real. Pero no me moví de mi cama... ¿o sí? Estaba soñando. Y estando allá no cuestionaba la validez de mi experiencia. Simplemente fluía con ella. Todo eso vivía en mí (soñaba, ¿no?). Era yo.
A veces siento que soy un loco en un psiquiátrico (Sucker Punch), o que estoy en coma (The Odyssey), o soñando dentro de sueños (Inception), o tal vez estoy conectado a una computadora (Matrix)... o puede que sea un retrasado inventando mundos. Perdido (Lost). Adicto a esta realidad que sin saber cómo he creado (The Nines).
Especulo que con el mundo me estoy hablando a mí mismo. Me pregunto si seré el único ser real en la existencia... porque solo puedo estar seguro de que yo sí existo. Y me siento infinitamente desolado. ¿Acaso seré un recuerdo? ¿Qué soy? ¿Quién soy? ¿La sombra de una vida? ¿Un juego del universo?
Sueños dentro de sueños. Me siento como una gota, no en un mar infinito... Simplemente una pequeña gota en una aterradora nada.
Si toda esta vida es mentira, es la mentira más hermosa. Tan hermosa que nunca quiero que termine. Por el milagro que nombro como amor. Porque en dos extremos ese es el motor del mundo. Y a mi corazón le gusta el lado bello.
Las respuestas llegaron. Las señales. El fin de la paranoia. Llegó la paz y la vida verdadera, la única meta importante... para darlo todo. El único regreso. La llave.
ReplyDeleteVolver al presente es volver a casa.
El regalo eterno.